sábado, 25 de febrero de 2012

Objetivos Tilt-Shift



En relación a la anterior entrada sobre la convergencia vertical hay que destacar que esta se produce porque las cámaras comunes mantienen siempre el paralelismo entre el Plano de Imagen y el Plano de Enfoque, por lo que la Profundidad de Campo y la Profundidad de Foco crecen siempre de manera paralela.

Es por ello que existen objetivos, y aplicaciones, que no mantienen ese paralelismo y permiten toda una serie de movimientos sobre la montura del objetivo y el sensor de la imagen, ya sea digital o de película. Esto se apoya, en términos de óptica, en la Ley de Scheimpflug. A partir de estos movimientos se pueden conseguir efectos como enfoques infinitos, desenfoques bruscos, variar la perspectiva de un objeto...

La ley de Scheimpflug establece que si se prolongan los planos de imagen, objetivo y objeto cuando estos se encuentran en un punto o en una recta se conseguira un plano total de enfoque en el objeto.



En la figura izquierda se puede observar una posicion "normal" (posicion paralela); por lo que la profundidad de campo crece de forma paralela. En cambio, en la figura de derecha la montura del objetivo se ha movido lateralmente o girado, en este caso se rompe ese paralelismo y la profundidad de campo ya no crece paralelamente.

Las cámaras convencionales no permiten realizar dichos movimientos, salvo que se incorporen ciertos complementos a cámaras reflex o de medio formato para obtener cierta movilidad, dando lugar a correción de paralelismos en arquitectura por ejemplo, enfoques mas proximos en fotografia de aproximacion, etc...

En fotografía, “Shift” (desplazamiento) implica mover el objetivo de forma paralela a su eje óptico para corregir la distorsión, mientras que “Tilt” (inclinación) controla el área enfocada cambiando la relación perpendicular normal existente entre el eje óptico del objetivo y el plano focal de la cámara. En el mercado se pueden encontrar objetivos Tilt-Shift (TSE) que disponen tanto de inclinación como de desplazamiento.

Los edificios altos parecen estrecharse en un punto en la parte superior de la fotografía cuando se fotografían con objetivos gran angular, que se trató en el anterior post; y efecto del desplazamiento es que corrige esta distorsión, ya que la cámara se ajusta de forma que su plano focal sea paralelo a la superficie de la pared.

Además los objetivos Tilt-Shift (TSE) también pueden girar en una ángulo de +-90º, por lo que también es posible aplicar un desplazamiento horizontal, y mediante esta técnica se pueden realizar fotos panorámicas dividiendo la escena del paisaje horizontalmente en varios disparos conectándolos por los extremos.

En el ambito de la fotografía Tilt-Shift la inclinación no es menos importante que el desplazamiento. Al cambiar el ángulo del eje óptico con respecto al plano focal de la cámara es posible hacer una foto con todo enfocado de cerca a lejos. La inclinación es importante cuando se desea conseguir un efecto de enfoque panonrámico con un ligero ajuste de apertura y una velocidad de obturación rápida, o, por el contrario, cuando se desea crear un efecto borroso en el fondo. Si se invierte la inclinación radicalmente se reduce el área de la imagen que se mantiene enfocada.

Los requisitos previos más importantes para una buena fotografía Tilt-shift son asegurarse que la cámara está nivelada en un trípode y comprobar la composición exacta de la escena mediante el visor.

En definitiva, los objetivos Tilt-Shift (TSE) corrigen la distorsión de la imagen y ajustan el área enfocada controlando el eje óptico del objetivo. Sin embargo, para sacar el mayor partido posible a estos objetivos, es necesario un conocimiento más profundo que la simple realización de estas correcciones o ajustes: se debe prestar mucha atención a la situación del motivo y la intención de la foto para tener muy claro cuál sería la mejor distancia de enfoque.

viernes, 17 de febrero de 2012

La convergencia vertical.


La mayoría de los edificios poseen cuatro caras, y a la hora de fotografiarlos hay que tener en cuenta que una de las convenciones visuales básicas dicta que sólo un alzado (o cara) debe aparecer por cada toma, incluso cuando entre en conflicto con la perspectiva real.

La manera en la que las líneas parecen converger en la distancia, lo que se conoce como punto de fuga, es un efecto completamente normal provocado por la perspectiva. En nuestra vida cotidiana no solemos ser conscientes de esta distorsión geométrica, ya que formamos parte de la escena real tridimensional. Esta distorsión resulta más evidente en las imágenes de objetos que no forman parte de nuestro entorno habitual. Esta sensación es normal siempre y cuando la vista esté más o menos nivelada, y la perspectiva se dirija al horizonte.

En cambio, cuando realizamos un encuadre picado la cosa cambia bastante. Por desgracia para la fotografía de arquitectura, nuestros ojos ven la convergencia como algo menos normal que en las fotografías tomadas a un edificio en dirección ascendente. Por otra parte las líneas verticales se inclinan una hacia otra, es decir fugan hacia un punto en el infinito y el efecto tiende a resultar negativo. La única forma de tomar una fotografía ascendente con resultados satisfactorios consiste en captarla de una forma exagerada e intencionada con un gran angular muy amplio. Si en la escena aparecieran personas y el edificio fuera un mero fondo, nada de esto tendría importancia. No obstante, si el edificio es el protagonista de la toma, habrá que resolver esta distorsión.

La problemática de las fotografías de este tipo es que, para abarcar todo un edificio desde un primer plano, que es la manera más habitual de fotografiarlo, suele ser necesario realizar un encuadre picado. Las leyes de la óptica son muy sencillas: el plano de la imagen, que en nuestro caso es el sensor de la cámara debe quedar paralelo a la fachada, es decir, en vertical. Y eso significa que la cámara debe enfocar en posición horizontal. Existen ciertas formas de conseguirlo:

-A partir de un mirador elevado, como el punto intermedio de un edificio que haya enfrente, lo cual siempre resulta difícil, por lo que no es bueno abusar de este método.

-Mediante un gran angular y con la cámara en horizontal de manera que los lados del edificio queden en vertical. Hay que alejarse de manera que se puede abarcar todo. A continuación, se recorta el primer plano inferior del que pueda prescindir, que ocupa casi la mitad de la imagen. El problema es que reduce el tamaño y la resolución de la imagen.

-Con un gran angular, como en el caso anterior, pero componiendo de tal manera que se incluya elemento interesante en primer plano para que la composición parezca intencionada.

-Alejándonos del edificio y usando un teleobjetivo.

-Corrigiendo la distorsión durante el proceso de edición de la imagen.

-Mediante un objetivo tilt-shift.

martes, 14 de febrero de 2012

Objetivos Tilt-Shift



En relación a la anterior entrada sobre la convergencia vertical hay que destacar que esta se produce porque las cámaras comunes mantienen siempre el paralelismo entre el Plano de Imagen y el Plano de Enfoque, por lo que la Profundidad de Campo y la Profundidad de Foco crecen siempre de manera paralela.

Es por ello que existen objetivos, y aplicaciones, que no mantienen ese paralelismo y permiten toda una serie de movimientos sobre la montura del objetivo y el sensor de la imagen, ya sea digital o de película. Esto se apoya, en términos de óptica, en la Ley de Scheimpflug. A partir de estos movimientos se pueden conseguir efectos como enfoques infinitos, desenfoques bruscos, variar la perspectiva de un objeto...

La ley de Scheimpflug establece que si se prolongan los planos de imagen, objetivo y objeto cuando estos se encuentran en un punto o en una recta se conseguira un plano total de enfoque en el objeto.



En la figura izquierda se puede observar una posicion "normal" (posicion paralela); por lo que la profundidad de campo crece de forma paralela. En cambio, en la figura de derecha la montura del objetivo se ha movido lateralmente o girado, en este caso se rompe ese paralelismo y la profundidad de campo ya no crece paralelamente.

Las cámaras convencionales no permiten realizar dichos movimientos, salvo que se incorporen ciertos complementos a cámaras reflex o de medio formato para obtener cierta movilidad, dando lugar a correción de paralelismos en arquitectura por ejemplo, enfoques mas proximos en fotografia de aproximacion, etc...

En fotografía, “Shift” (desplazamiento) implica mover el objetivo de forma paralela a su eje óptico para corregir la distorsión, mientras que “Tilt” (inclinación) controla el área enfocada cambiando la relación perpendicular normal existente entre el eje óptico del objetivo y el plano focal de la cámara. En el mercado se pueden encontrar objetivos Tilt-Shift (TSE) que disponen tanto de inclinación como de desplazamiento.

Los edificios altos parecen estrecharse en un punto en la parte superior de la fotografía cuando se fotografían con objetivos gran angular, que se trató en el anterior post; y efecto del desplazamiento es que corrige esta distorsión, ya que la cámara se ajusta de forma que su plano focal sea paralelo a la superficie de la pared.

Además los objetivos Tilt-Shift (TSE) también pueden girar en una ángulo de +-90º, por lo que también es posible aplicar un desplazamiento horizontal, y mediante esta técnica se pueden realizar fotos panorámicas dividiendo la escena del paisaje horizontalmente en varios disparos conectándolos por los extremos.

En el ambito de la fotografía Tilt-Shift la inclinación no es menos importante que el desplazamiento. Al cambiar el ángulo del eje óptico con respecto al plano focal de la cámara es posible hacer una foto con todo enfocado de cerca a lejos. La inclinación es importante cuando se desea conseguir un efecto de enfoque panonrámico con un ligero ajuste de apertura y una velocidad de obturación rápida, o, por el contrario, cuando se desea crear un efecto borroso en el fondo. Si se invierte la inclinación radicalmente se reduce el área de la imagen que se mantiene enfocada.

Los requisitos previos más importantes para una buena fotografía Tilt-shift son asegurarse que la cámara está nivelada en un trípode y comprobar la composición exacta de la escena mediante el visor.

En definitiva, los objetivos Tilt-Shift (TSE) corrigen la distorsión de la imagen y ajustan el área enfocada controlando el eje óptico del objetivo. Sin embargo, para sacar el mayor partido posible a estos objetivos, es necesario un conocimiento más profundo que la simple realización de estas correcciones o ajustes: se debe prestar mucha atención a la situación del motivo y la intención de la foto para tener muy claro cuál sería la mejor distancia de enfoque.

miércoles, 8 de febrero de 2012

Duccio Malagamba

Duccio Malagamba (La Spezia, 1960) se puede considerar actualmente uno de los fotógrafos de arquitectura más importantes. Dada su formación como arquitecto aterrizó en Barcelona a la búsquedad de trabajo, y a pesar de recalar en el estudio de Martorell, Bohigas y Mackay; terminó dedicándose definitivamente a la fotografía en el año 1991.


Edificio Fundación Ibere Camargo, Brasil / Alvaro Siza © Duccio Malagamba

Este empujón para dedicarse a la labor fotgráfica llega en forma de Beca de Imvestigación “Orientamenti e Influenze dell’Architettura Spagnola Contemporanea”, por parte de "CNR" (el “CSIC” italiano).

Duccio trata de alejarse de la fotografía de arquitectura meramente documental, para ello intenta recoger la experciencia espacial que supondría visitar los edificios que plasma en sus trabajos. Por eso, es capaz de dotar una cierta dosis de ficción a la idea original del arquitecto con lo que consigue sugerir, subrayar, estimular... sin traicionar el espíritu de dichas obras.


Guggenheim Bilbao / Frank O. Gehry © Duccio Malagamba

A pesar de haber trabajado con arquitectos de la talla de Siza, Herzog & De Meuron, Moneo... considera que Alvaro Siza es su arquitecto de cabecera.

También cabe destacar sus cinco “Lux” –Premios Nacionales de Fotografía– otorgados por la Asociación de Fotógrafos Profesionales de España, así como su faceta de articulista de Arquitectura. De hecho fue, desde 1995 hasta 2008, Director Técnico y luego, responsable de la sección Gran Formato de la revista española 'Diseño Interior'.

http://www.ducciomalagamba.com/

domingo, 29 de enero de 2012

Detalles arquitectónicos.

Dentro de la fotografía de Arquitectura los detalles pueden ser igual de importantes, y requieren de técnicas diferentes.

El hecho de centrarse en los detalles, puede servir para obtener un conjunto de imágenes más amplio y variado. En el caso de los detalles arquitectónicos, decorativos o estructurales, representan una parte muy importante de la fotografía arquitectónica. Cuando se realiza un trabajo profesional sobre arquitectura la muestra casi siempre incluirá una serie de detalles de elementos especifícos, por ejemplo, una ménsula, un capitel, una puerta, ventanas...

El proceso de fotografiar los detalles suele ser un ejercicio muy diferente al de obtener la visión general del edificio. En primer lugar hay que identificar los detalles a fotografiar. Estos detalles se pueden dividir en dos tipos: los de carácter documental, que tienen un valor arquitectónico, y los que hacen la imagen más interesante, independientemente de su importancia. Para los de carácter documental, es necesario una lista, facilitada por el mismo cliente para el que se realiza el trabajo o se puede obtener a partir de alguna guía.

Para fotografiar detalles lo mejor es recurrir al teleobjetivo. Lógicamente, se producirá un pequeño efecto de convergencia, pero no al nivel de los grandes angulares. Lo más recomendable es evitar las líneas verticales en la fotografía de detalle.

Los detalles no son imprescindibles, pero resultan bonitos, se justifican por sí mismos y dependen mucho de lo que más atraiga a cada uno.

viernes, 27 de enero de 2012

Iwan Baan

Iwan Baan es uno de los fotógrafos que tengo como referente en lo que se trata de fotografía de Arquitectura y de Edificación es. Iwan es un fotógrafo holándes nacido en 1975 a las afueras de Amsterdam y que se formó en la Real Academia de Arte de La Haya. A pesar de ser un fotógrafo especializado en Arquitectura, sus inicios hay que buscarlos en la fotografía documental.



En la imagen de arriba se ve a Iwan Baan junto a Lars Mueller.

Su punto de partida como fotógrafo de Arquitectura se remonta a 2005 cuando cuando propuso a Rem Koolhaas documentar un proyecto para el estudio de arquitectura OMA. Dicha propuesta lo llevo a documentar la construcción de La propuesta llevó a su primer gran proyecto, la documentación de la construcción de la sede la Televisión Central de China (CCTV) de OMA y la construcción del Estadio Olímpico Nacional de Herzog & de Meuron, ambos en Beijing.



Lo que me atrae de su fotografía es que busca eliminar esa sensación de edificios fríos y totalmente descontextualizados que se da habitualmente en la fotografía de edificación. Para ello añade personas, trabajadores de los edificios que fotografía, coches...lo que además de dotar a la fotografía de un elemento de escala, la situa en un contexto, momento o situación. En definitiva, intenta representar los edificios como de verdad funcionan.

En su web http://www.iwan.com/iwan_index.php se pueden encontrar más referencias sobre sus trabajos y publicaciones, algunas de ellas muy recomendables.

lunes, 23 de enero de 2012

Fachada Centro Comercial Plenilunio (Madrid)

Los cimientos

He estado dándole vuelta al tema sobre el que podría ir la primera entrada del blog, he barajado la posibilidad que fuera una foto, ya que pretendo que sea un fotoblog; que fuera un fotógrafo de arquitectura reconocido (y que me guste), también ire poniendo cosillas sobre fotográfos; o algún post sobre técnica fotográfica, que también ire colgando.

Al final me decidí por empezar con un post sobre los inicios de la fotografía porque creo que en cualquier cosa que se haga hay que empezar por el principio. Por eso empezaré hablando de la fotografía más primitiva.

Creo que es justo considerar el inicio de la fotografía en el siglo XVIII, con las investigaciones sobre la sensibilidad de la luz a las sales de plata (nitrato de plata y cloruro de plata) llevadas a cabo por los alemanes Schultze y Scheele, el genovés Jean Senebier o del inglés William Lewis.

A partir de los desarrollos de Lewis, Thomas Wedgwood (hijo de un célebre fabricante de porcelana) obtiene, a principios del siglo XIX, impresiones de objetos y plantas colocados directamente sobre una hoja de papel sensibilizada, aunque sin llegarlos a fijar de manera duradera.

Estas investigaciones dieron lugar a que antes de 1839, año en que se presenta el daguerrotipo, se conocieran las reglas de la formación de la imagen fotográfica. Como ejemplos de estas investigaciones se pueden considerar las de Thomas Young en 1802 y las de Samuel Morse en 1822, los cuales consiguieron realizar imágenes en negativo. En este sentido es justo nombrar al astrónomo estadounidense John Draper y al británico James B. Reade.